De pobladores, electores y otras yerbas

De pobladores, electores y otras yerbas.

Pequeño y apretado como un puño. Así dice la canción y así es El Salvador. Los que habitamos en este país percibimos diariamente la presión demográfica. A muchos de nosotros, los de a pie, poco nos importan los estudios demográficos que marcan en El Salvador como el país con la mayor densidad poblacional del hemisferio. Y es que basta con vivir el caos vehicular, el transporte colectivo, el difícil acceso al agua, al trabajo, la vivienda para constatar de vivo olor lo que la demografía indica.

El déficit habitacional jamás en nuestro país ha sido motivo de sorpresa, como tampoco lo ha sido la enormidad en las diferencias de condiciones de vida en lo rural y lo urbano. Cosas esenciales como el acceso al agua y el respeto a la naturaleza y el desorden territorial poco a poco comienzan a preocuparnos. Al gobierno por su parte, exceptuando sus intereses políticos a favor de grupos empresariales, poco o nada le importa éstos fenómenos, es mas, la lucha gubernamental es por mantener las cosas así.

Lo que sí les importa, es mantener la manipulación sobre la información pública, eso incluye la información esencial sobre cuántos somos, qué somos y cómo vivimos, fundamento para la planificación de un país.

En el 2005, la Dirección General de Estadísticas y Censos reportaba un censo nacional de 6,874,900 habitantes, dos años más tarde, en mayo de 2007 sólo 5,744,113, la diferencia: 1,130,787. Según las proyecciones de propios y extraños, la población debería andar cerca de los 7 o 7,2 millones. En el censo publicado este mes de Mayo se arroja una población en edad de poder votar de 3,446,468; sin embargo en el padrón electoral hay 4,113,333 fichas electrónicas de ciudadanos con derecho a voto, lo que supone una diferencia de 666,865. El padrón electoral debería basarse en el Censo poblacional, pero, según estos datos, es al revés. ¿Cómo garantizar transparencia en los próximos comicios con tal dispersión de datos y falta de sustento técnico y científico en la información?.

Para colmo, a pesar de la hambruna, desnutrición, desorden territorial y próximo colapso demográfico, ecológico, económico y social, este país según este censo, es mas rico de lo que se pensaba, ganamos mas de 3 mil dólares al año. Por razón del neoliberalismo, acá no se produce casi nada más que gente…pero aún así somos un país…de renta media alta.
El río suena porque piedras lleva.

De lo que no se habla en lo absoluto, someramente quizá, es del promedio diario de emigrantes calculado por algunos de 400 a 700 humanos expulsados por falta de tierra, pan, trabajo, vivienda y salarios dignos. Sumarían de 146 mil a 256 mil humanos anualmente. Tampoco se dice nada de la obtención del DUI en EUA para beneficio electoral del partido por ahora en el gobierno, éste dato no ha sido incorporado al resultado del censo aún y cuando éste se efectuó hace mas de un año. Los medios no cuestionan los resultados del censo por inverosímiles que parezcan, ni la manipulación del registro de las personas naturales para usos comerciales y electorales, tal como sucede en Glendale, Los Ángeles, donde nuestros compatriotas con DUI, legales o no, reciben llamadas telefónicas invitándoles a actividades proselitistas del partido arena.

En suma, soberano desvergue académico en los responsables de esos registros, quienes siguiendo claras directrices políticas obstaculizan el acceso a esa información pública, tan necesaria para la panificación de este increíble, inaudito y desordenado país.

EQUIPO MAPACHE
San Salvador, 24 de Mayo de 2008.